Hoy desperté y, al abrir las cortinas, encontré que el mundo despedía cierto olor a trementina. Donde otrora reposaran prados y ramas sólo habían quedado sus contornos, blancos en el blanco lienzo de las primeras nieves de Tsukuba.
[ Je ne sais pas choisir — Emily Loizeau ]
[ Je ne sais pas choisir — Emily Loizeau ]
0 dimes y diretes para “初雪”
Publicar un comentario
Será comentar, porque qué más.