Ayer fui a conocer la JAXA con Azuma. Estuvimos mirando satélites, cohetes y videos de la luna en alta definición entre ancianos de una era geológica de edad y niños con el pelo castaño nuevecito. Algunos estaban disfrazados de astronautas, y nadie se veía aburrido o cansado. Visitar institutos científicos es un plan familiar muy popular en Tsukuba.
El programa del día fue bastante sencillo: escuchamos el sonido de un cohete al despegar, comimos masmelo congelado en nitrógeno líquido, almorzamos pollo con papas y nos tomamos fotos haciendo idioteces por todo el lugar.
Parte de la tarde la pasamos sentadas en unas sillas plásticas plateadas de diseño ultra-futurista, reflexionando sobre lo que ha significado vivir en Japón para nosotras. Por lo pronto yo sé que vine a este archipiélago buscando algo sin saber qué era, y creo que lo encontré: me encontré a mí misma.
[ 凛とする — 元ちとせ ]
El programa del día fue bastante sencillo: escuchamos el sonido de un cohete al despegar, comimos masmelo congelado en nitrógeno líquido, almorzamos pollo con papas y nos tomamos fotos haciendo idioteces por todo el lugar.
Parte de la tarde la pasamos sentadas en unas sillas plásticas plateadas de diseño ultra-futurista, reflexionando sobre lo que ha significado vivir en Japón para nosotras. Por lo pronto yo sé que vine a este archipiélago buscando algo sin saber qué era, y creo que lo encontré: me encontré a mí misma.
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