Después del banquete
2 comentarios Otro delirio de Olavia Kite, hoy miércoles, enero 27, 2010 a las 5:10 p. m..
Cuando el asunto empieza, uno cree que esta vez es diferente y se lo anuncia a todo el mundo con orgullo: "esta vez es diferente". Uno desfila airoso por las calles, saludando con la mano a las multitudes como el soldado que va para la guerra creyendo que ya ha regresado con la victoria a cuestas.
Pero entonces, sin saber cómo ni cuándo, todo resulta igual que siempre. El último barco de la Grande y Felicísima Armada se hunde y a uno no le queda más que agacharse a recoger las palabras y los corazones que dejó regados por todo el piso cual confeti pisoteado al final de la fiesta.
Lo bueno es poder recordar siempre que hubo fiesta.
[ Distant Radio — Devics ]
Pero entonces, sin saber cómo ni cuándo, todo resulta igual que siempre. El último barco de la Grande y Felicísima Armada se hunde y a uno no le queda más que agacharse a recoger las palabras y los corazones que dejó regados por todo el piso cual confeti pisoteado al final de la fiesta.
Lo bueno es poder recordar siempre que hubo fiesta.
[ Distant Radio — Devics ]
Etiquetas: love or lack thereof, observaciones
Hay cierta coherencia alimenticia entre los últimos posts. Mola...
¡Mu rico!